«Conmovedora» es la palabra que mejor presenta la novela Memorias de Mamá Blanca, considerada un hito de la literatura venezolana.
Esta obra expone la tensión generacional y la búsqueda de la identidad dentro una familia conservadora. En sus páginas se contraponen la ruralidad y la industrialización durante la modernización de Venezuela a principios del siglo XX.
Desde la introspección, la protagonista nos presenta su visión de los personajes que rodearon su infancia y tránsito de la rural Piedra Azul a la urbana Caracas, mientras hace una crítica social salpicada de enternecedora prosa poética y sutil sentido del humor.